Un año más volvemos a llenar las calles de rúas, de disfraces para todas las edades, pero sobre todo de mucho colorido al ritmo de sus comparsas.
Como toda festividad popular se esconde una historia detrás que nos lleva a descubrir su origen. El Carnaval tiene un pasado la mar de interesante y seguramente todos aquellos fieles a esta fiesta tan mundialmente conocida pueden tener la curiosidad por conocerla más a fondo.
El origen del Carnaval
El origen de esta celebración es muy probable que se encuentre en las fiestas paganas con las que se rendía tributo en honor a Baco, dios romano asiduo al caos, la fiesta y al vino. A su vez, también se les atribuía homenaje a las saturnales y las lupercales, ambas festividades romanas.
Mientras que en Egipto se rendía tributo al buey Apis en Menfis. De hecho, según algunos historiadores, esta fiesta se remontaría a la Sumeria y el Egipto antiguo 5.000 años atrás con festejos muy similares a las épocas del Imperio Romano. El Carnaval acabó extendiéndose por Europa, llegando incluso a las Américas, donde los transmitieron navegantes españoles y portugueses a finales del siglo XV.
Que el ritmo no pare
Ya en nuestros días, podemos disfrutar de estas fiestas ya sea en Santa Cruz de Tenerife, en las Palmas de Gran Canaria, en Cádiz con sus famosas chirigotas, o en Águilas (Murcia).
También podemos acudir a alguno de los carnavales más famosos del mundo y más internacionales, como el de Venecia (en Italia), Río de Janeiro (en Brasil) o Barranquilla (en Colombia).
Esta famosa fiesta sigue en pie esta semana, porque ya se sabe que la vida es un Carnaval y hay que vivirla para disfrutarla, enterrar la sardina y a partir de aquí, tocará esperar a la Semana Santa.
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Francisco Marin té una novel·la en curs.