A través del correo de Fundación Quiero Trabajo me apareció un posible acontecimiento. No lo conocía, y me pareció una bonita experiencia que creí que me podría ir bien. Se buscaba voluntarios para este evento, que se llamaba The Festival of Consciousness, o Festival de la Conciencia. Me llamó la atención, ya que miraba algo artístico para mí.
Se tenía que hacer papeleo, hasta formulario. Podías solicitar dónde querías estar: si en el Hall, en los exteriores, en la entrada…etc.
Solicité la entrada, el hall y exteriores. Me lo admitieron.
EVENTO DE FIESTA
El 4 de julio tuve una cena, pues nos teníamos que conocer entre todos. Fue una fiesta por todo lo alto. Hubo catering, cava, y podías pedir lo que quisieras de bebida, siempre y cuando lo tuvieran. Me gustaron los compañeros, y conocí a uno de mis managers.
Hicimos una actividad y fue muy guay. La persona que lo impartió, había estado en la India y tocaba un instrumento muy raro. Aún así su sonido fue muy bonito y dulce, porque nos relajaba. Nos hicieron un tour guiado.
12, 13, 14 DE JULIO
The Festival of Consciousness se hacía en pocas fechas. Empezaban a montar el 12 de julio por la mañana y acabó el 15 ya que tenían que desmontar. Por tanto, el 12 por la tarde, 13 y 14 fueron los días más fuertes de trabajo, porque venía mucha gente.
El festival se hacía en el Centro de Convenciones Internacionales de Barcelona (CCIB), ubicado en el Fórum. Cerca del Centro Comercial de Diagonal Mar.
ENTRE SALAS Y RELACIONES
La distribución era magnífica, estaba muy bien organizado. The Connection Donme, Exploration Dome, Smash Dome, Sala Vip, Hearing Lab, Freedome Dome… Estas eran las carpas que habían. Managers, organizadores, ponentes y personal de seguridad se ocupaban de todo.
La Sala Vip era para los voluntarios. Ahí te podías cambiar de camiseta, descansar un poquito e incluso comer. No tenías que pagar nada en la comida, todo era beneficio para nosotros.
Y tanto aquí como en el exterior, conocí al mismísimo Macaco. Me hice una fotografía con él, y es un hombre encantador, muy majo.
1000 EXPERIENCIAS
En Smash Dome se hacía una actividad de burbujas, era una de mis tareas. Me chifló, ya de pequeñita me encantaba hacer pompas de jabón. Disfruté mucho. Me hablaron de la bañera de agua y hielo, y metí las manos. Primero una, para ver cómo estaba el agua. Estaba buenísima, así que metí la otra. Me mojé la cara, y me enteré de que iba muy bien para el cutis. Yo no lo sabía y me sorprendió.
Antes de entrar en el CCIB habían montado una cama de cojines, unos merenderos, una carpa de la Estrella Damm y toda una hilera de foodtrucks.
En uno de mis momentos de descanso me estiré en la cómoda cama de cojines.
Ví a Macaco cantar, aunque fue muy breve porque estaban probando.
Fue todo precioso. Además en InfoPoint había un trocito lleno de libretas artesanas, marcapáginas y libros.
Me compré una libreta, porque era muy diferente de las que tengo. Encima llamaban mucho la atención, y eso a cara al público va muy bien para vender. Quiero mencionar que toqué por primera vez el gong, y fue algo único y muy terapéutico.
EN LA PUERTA DEL FESTIVAL
En la entrada teníamos que descargar el ticketerum, un programa para identificar a las personas que entraban. Y poner la pulsera que les correspondía con su pase correspondiente. Ya que habían bonos de un día, de un fin de semana entero o bien de 3 días.
Así que a través del QR, podían acceder.
Algunas personas venían porque les llamaba la curiosidad, lo que se hacía allí. Normal si estás al lado del Museo de Ciencias Naturales, que está dentro del Fórum.
DESEANDO VOLVER A VIVIRLO
Me ha encantado tanto colaborar en este acontecimiento, que me volcaría de nuevo en ello. En este caso, por experimentar el ser una de las ponentes. Hacer una charla e incluso una conferencia.
Sería otra experiencia especial.
He tenido muy buen recuerdo, y del personal también.
Todos me han hecho sentirme muy bien, y como una más. Tener una compañera con Síndrome de Down, les ha ayudado a ser más humanos todavía. La compañía ha sido de agradecer.