Viendo los resultados más recientes del Barça de Xavi Hernández realmente es para empezar a preocuparse, y más aún cuando suma su primera derrota en la presente Champions League ante el Shakhtar Donetsk con un 1-0 en su contra con gol de Sikan.
Este nuevo tropiezo hará que el choque ante el Oporto (del próximo 28 de noviembre) sea vital para conseguir el pase a octavos. Aun así y en lo que hace referencia al juego, deja mucho que desear y por culpa de ello vuelven a encenderse las alarmas de alerta.
El Barça, ¿en crisis?
Si nos remontamos a las jornadas cinco y seis de este campeonato liguero, nadie podía presagiar que tras vencer al Real Betis Balompié (5-0) y remontarle al Real Club Celta de Vigo (3-2) hayan bajado el listón de esta forma tan alarmante.
Salvo los empates con el Mallorca y el Granada con los que salieron beneficiados. Pero cuando se trata de medirse con los equipos más difíciles de la Liga (Sevilla, Athletic, Real Madrid y Real Sociedad) les cuesta más rematar la faena.
En noviembre no se ganan los títulos y aún les queda mucho por hacer, hablar de crisis igual sería descabellado pero lo más acertado sería hablar de bache o bien de tropiezo.
A salir del bache
El equipo es consciente de lo que se juega y de que aún queda mucho por jugar. A los que han vuelto de sus lesiones aún les falta rodaje para recuperar la forma necesaria para volver por el camino del buen juego.
Sólo de esta manera podrán recuperar las buenas sensaciones y ya no solo ganar sus encuentros, si no que además vuelvan a jugar como solo ellos saben hacerlo.