Bella y fresca flor que brota en mi corazón,
la que llena de color la vida que paso con ella.
Por ella es una eterna primavera,
con su esencia y fragancia
va impregnando
mi más plena felicidad.
Vivo por ella en cada momento,
suspiro llegar a ser su fiel jardinero,
y con ese amor que alberga
en mi interior amarla eternamente.
Hermosa flor,
cada gota de mis lágrimas,
se va deslizando por sus lindos y delicados pétalos
mientras va alzando su presencia
frente al resplandor
del sol que transmite mi mirada.
Porque lo doy todo por ella,
con todo mimo y cariño
sintiendo ese sentimiento a flor de piel,
que a través del tiempo se mantiene
como el primer día
tan linda y bella y sin marchitar.
Una huella imborrable,
la que esa flor va dejando en mi ser,
con nombre de mujer,
que quedará grabado en mi mente
marcado a fuego lento e intenso.
A través de esa misma intensidad la noto
cada vez más cerca de mí,
como esa voz que surge de la madre naturaleza,
voy sintiendo en mi alma como va naciendo
La flor del amor.