El servicio de Ocio y Turismo de la Fundación Catalana Síndrome de Down (FCSD) organiza viajes, tanto de verano como de invierno, para las personas con síndrome de Down y en otras situaciones de discapacidad intelectual. Con el grupo en el que participamos, hemos ido a Reus y Banyoles en los últimos años, y Tortosa ha sido nuestro tercer viaje consecutivo.
Sin duda alguna, este viaje al municipio de la provincia de Tarragona con vistas al Río Ebro ha sido muy enriquecedor tanto a nivel histórico como lúdico.

Durante los últimos días de este pasado mes de diciembre del 2024 hemos disfrutado de este lugar no solo con encanto si no también magia. Durante los paseos por Tortosa nos dejamos llevar por el ambiente navideño de sus calles durante algunas de las noches que hemos salido por su casco antiguo.
Visitas con mucha historia

Algunas de las actividades que merece mencionar, hemos estado dentro de uno de los veinte refugios antiaéreos de la Guerra Civil que se encuentran en Tortosa. A través de unos audios y en completa oscuridad hemos vivido algunos de los bombardeos que muchos sufrieron en los años 1936-39.
También vimos el Museo de Tortosa que se encuentra en Amposta en el que entre otras cosas vimos el tipo de material con el que hacían sus ropajes los ancestros de épocas antiguas (desde los íberos a los habitantes de Turtuxa, en la antigua Àl-Andalus) al igual que buena parte de su vajillas y utensilios.
Siguiendo la ruta además de haber visto el Castell de Suda, que fue construido en el siglo X y se construyó bajo el Califato de Abderramán III sobre un antiguo acrópolis romano que linda con el museo de los jardines del Príncep.
Esta especie de ruta histórica finaliza en el Parque urbano de Teodoro González (que fue un político tortosino), ubicado en el Bajo Ebro, y que se encuentra protegido como Bien Cultural de Interés Local. Durante mucho tiempo fue el único de su ciudad, formando parte de su ensanche.
Un viaje de ensueño
Ahora ya solo nos queda el recuerdo de este tercer viaje que a diferencia de los anteriores ya mencionados, ha sido un viaje de ensueño navideño. Tan solo nos quedan aquellos souvenirs que nos harán acordarnos de esos días que hemos pasado en ese bello municipio de Tarragona del que con nostalgia siempre nos acordaremos como: Tortosa, navidades con diversión e inclusión.